En los territorios reales, se articulan principalmente las relaciones primarias como los procesos o fenómenos complejos. A partir de ellos se despliegan una serie de acciones- consecuencias como la gesticulación de un TERRITORIO PENSADO de acuerdo a la naturaleza del territorio. Para este conflicto, suele ser difícil el concepto de "naturaleza", porque este término hace referencia a una escencia, o raíz; la cual no es certera por las caracteristicas rizomáticas de una toma de terreno.
Sin embargo, sigue siendo un híbrido (con base dialéctica) por las relaciones que describe M. Santos: entre lo natural y artificial, tiempo y espacio, lo global y local, horizontalidades y verticalidades, etc. las cuales contribuyen a definir un territorio según su naturaleza. Para este caso, identifico:
- Tiempo y espacio: los terrenos tomados se consolidarán con el paso del tiempo manifestado en el modo en como el espacio va siendo ocupado o utilizado. Primeramente, son territorios de gran incertidumbre sobre el futuro pero a la vez deben proyectarse sobre el espacio que estan "tomándose" y posteriormente se crearan mayor cantidad de fijos (y consecuentemente flujos)produciendo una "sucesión" en él, desde el ámbito social y técnico.
- Horizontalidades y verticalidades: Las verticalidades quedan un poco rezagados en cuanto a que no se cumple la jerarquía entre términos técnicos, financieros y políticos, debido a la falta de regularización de este conflicto, o la falta legalidades de las acciones. Las horizontalidades son facilmente reconocibles por que se refiere a la organización social la que en casos como este adopta una fuerza mayor y probablemente debido a la débil verticalidad descendente.
- Razón y emoción: es un híbrido muy difícil de analizar para este caso pero resulta de vital importancia. Son las emociones las que motivan a un grupo social al actuar (tangiblemente) lo que debe ser controlado debido a la fragilidad del problema, pero no puede ser frenado porque es el motor para la realización del territorio posible; y la racionalidad trabaja como el pedal de freno en cuanto puedan o no, ser llevadas a cabo.
Estos híbridos, son base para la construcción de un TERRITORIO POSIBLE, donde las proximidades espaciales y organizacionales van creando situaciones jerárquicas o homólogas/complementarias. Esto es un supuesto que el Estado no ha logrado asimilar en su rol . Es cuestionable la racionalidad del Estado en materias como las tomas de terreno, que producen una serie de problematicas por ejemplo en materias como el uso de suelo, crecimiento del radio urbano, cambio en el suelo rural, acceso a la vivienda, accesibilidad, conectividad, etc., las cuales son resueltas parcialmente por órganos especializados en sus materias respectivas, pero no de una manera integral lo que arrastra estos problemas como una cadena.
Con respecto a esto, el Estado "reconoce y ampara a los grupos intermedios a través de los cuales se organiza y estructura la sociedad y les garantiza la adecuada autonomía para cumplir sus propios fines específicos" (según lo estipulado en el Articulo I de la Constitución). Pero se cumple? Tenemos el caso de nuevos grupos intermedios como ANDHA Chile, que son una consecuencia de la mala gestión del gobierno o la mala planificación respecto a los temas de vivienda. Se deja de manifiesto con estos casos, que Estado debiese incorporar la dialéctica para gestionar políticas, planes y proyectos con entendimiento de lo híbrido del territorio, pero cómo empezar a adoptar esta visión propuesta por Bozzano, la cual considero apropiada para el caso chileno?
Seguramente, el rol de un geógrafo no cambiará políticas y planes pero puede ser una visión adoptada para tratar proyectos nuevos en una escala local, junto a las competencias profesionales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario